Traer un trocito de campo a casa para crear una atmósfera tranquila, buscar refugio en la naturaleza y en las costumbres tradicionales para escapar del acelerado ritmo actual, es una terapia que cada día más personas incluyen a sus vidas.
Cuando hablamos de decoración campestre, lo primero que te vendrá a la mente son imágenes de casas de campo, muebles de madera rústica, flores, objetos de latón…Y es cierto, porque este estilo recoge todo esto y más…
La arquitectura ejerce una gran influencia en los ambientes del estilo campestre. Las técnicas constructivas y elementos estructurales tradicionales se mantienen intactos para transformarse en elementos activos de la decoración. Las vigas de madera, las paredes de piedra y las chimeneas se han convertido, de este modo, en imágenes emblemáticas del estilo.
Sin embargo, a este estilo lo vamos a dividir en otros sub-estilos, de esta forma veremos más claro como podemos combinar ciertos objetos y colores creando espacios diferentes dentro del estilo campestre.
- Romántico floral o provenzal. Es un estilo dulce y alegre. Predominan los colores pastel y las decoraciones florales.
Utiliza telas con estampado floras y muebles de inspiración tradicional pintados de colores pasteles. Se utilizan telas de fibras naturales, cestas de mimbre, lozas y cerámicas esmaltadas.
Sus ambientes se basan en un sencillo y práctico mobiliario de madera y un uso delicado a la vez que espontáneo de los colores.
Los muebles se distinguen por sus acabados. Suelen ser decapados, el blanqueado, el encerado y el teñido.
Las plantas y flores, tanto naturales como secas, so elementos decorativos muy característicos de este estilo.
2. Rústico. Es un estilo de solidez y austeridad. Los muebles suelen ser grandes y de fuerte personalidad. También se utiliza el hierro forjado en tiradores, pasamanos, pomos, etc.
Se recuperan objetos del pasado como estufas de leña, fogones, cazos de cobre, teteras, vajillas de barro, etc.
Los colores son los tierras, cobrizos , tostados…, todos ellos cálidos y delicados para construir una atmósfera de tranquilidad y sosiego. Si la vivienda está cerca del mar se opta por los añiles y lavanda, el verde agua y el verde tila.
3. Neohippie. Un estilo que inspira tranquilidad y frescura. los muebles son de hierro o madera, recuperados y personalizados por sus propietarios. Se utilizan botellas antiguas de cristal coloreado, farolillos, cortinas vaporosas y largas, colchonetas y cojines de rayas, de crochet…
En este estilo se utiliza mucho el reciclado. También el crochét colorista. Es un look que nos recuerda a los tiempos de nuestras abuelas cuando hacían colchas, cojines y otros complementos de crochét.
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Las lámparas son esenciales para iluminar una casa de estilo campestre, añadiendo calidez y atmósfera. Combinadas con la decoración adecuada, crean un ambiente acogedor que resalta la belleza natural del entorno rural.